Por qué Kiss Paris?

Explicar por qué nace ¨Kiss París¨ es narrar una breve historia de mi vida, no lo puedo hacer de otra forma. Porque allí están las profundas motivaciones que me hacen compartir mi asombro y deleite por esta ciudad que todo lo ilumina.

A los ocho años, mi mente se abrió a un mundo completamente nuevo… de Buenos Aires nos mudamos con mi familia a París! Qué sabía yo de París…? Nada!

Al llegar a Francia, estuvimos tres meses en la ciudad de Poitiers que queda a 330 km de París, en el centro del país. Teníamos solo unos meses para aprender el idioma, porque luego nos instalábamos en París por un par de años, y claro… directo al cole! Al colegio público francés, nada de escuela a distancia con Argentina.

Ese tiempo en Poitiers, me permitió aprender, entender y hacerme comprender. Era verano, y habré pasado un tiempo considerable sin hablar en la colonia de vacaciones a la que mi hermano y yo íbamos. Digo que habrá sido ¨un tiempo considerable¨, porque el día que pronuncié una frase… la cara de una de mis compañeras se iluminó y gritó a todo el grupo: ¨elle a parlé!!¨ (habló!!).  Y todo fue un gran OOOOOOOOHHHHHHHH!

De Poitiers a París! Nuestra casa estaba a metros de la Tour Eiffel, en el 7ème arrondissement (distrito 7). Para ir a nuestra escuela ¨Ecole Camus¨, cruzábamos el Champ de Mars, en una caminata de 10-15 minutos.

8, avenue Charles Floquet, la casa en la que vivimos en París.
En el camino al cole todos los días.

Nos adaptamos al nuevo entorno y ciudad. Adoptando el trajinar de la vida en París, al mismo tiempo que París nos adoptaba.  Íbamos a la escuela del barrio que nos correspondía, jugábamos en el Champ de Mars, trepándonos a los árboles, comíamos ¨des marrons chauds¨ (castañas calientes) en invierno, compradas a una pareja de viejitos que empujaban su carrito delante de nuestra casa para instalarse en el puente que une Trocadéro con la Tour Eiffel, el Pont D´Iéna. Correcto. Lugar imprescindible de paso para los miles de turistas y parisinos.

Jugábamos en la calle, patinábamos, andábamos en bici. Por las mañanas, los días del fin de semana, comprábamos la baguette en la boulangerie, nos movíamos en el Metro de un lado al otro de la ciudad.

 

 

 

 

Pasamos dos años con mi familia en París, y una parte importante de nuestros corazones se quedó en sus calles, en sus árboles, en sus brasseries, y en toda Francia.

Una vez de vuelta en Argentina, seguí inmersa en la cultura francesa a través del colegio, el Liceo Francés ¨Jean Mermoz¨ y de los amigos con los que transité la etapa de la adolescencia.

La vida me llevó diez años después (a los 18) a descubrir otro país, un poco más nórdico, Alemania. Dos años pasados allí también, un poco más fríos, durante los cuales volví a París más de un par de veces, tanta es la fascinación que despliega esta ciudad. Además de los buenos amigos que están allí.

De vuelta en Argentina, empecé mi carrera y mi paso profesional hacia el mundo corporativo, después de un par de experiencias, no podía ser otro que hacia una empresa francesa.

Diez años pasaron, y otra vez la vida (o quizás esta vez, lo busqué un poco yo), me llevó hacia otro país.  La ¨Madre Patria¨ me recibió en Madrid para seguir trabajando, al principio, en la misma compañía que lo venía haciendo en Argentina, y luego en otra… también francesa! Muchos viajes de placer y de trabajo a París y otras ciudades de Francia.
Esta vez, la estadía fue un poco más larga, por el simple hecho que nunca fue programada; la experiencia no tenía fecha de caducidad.

Pero luego de otros diez años, el click de la familia hizo ruido, y de España volvimos, como tantas otras veces, a Argentina, nuestro país.

Mi siguiente paso profesional volvió a dirigirse hacia una empresa francesa, con sede en París!

Y, otra vez, París en mis destinos, personales y profesionales. Siempre, repitiéndose incansable a mis ojos, a mi ilusión, a mis ganas de recorrerla y de asombrarme solo con levantar la vista, con escucharla en boca de los parisinos, con olerla desde las brasseries que inundan las calles. Caminarla ya solo es un lujo!

Lamentablemente, el 13 de noviembre del 2015 nos tocó presenciar desde la distancia, un hecho abominable contra la sociedad francesa en particular, y contra la sociedad del mundo en general.
Los actos de terrorismo pusieron a París en primera plana por un motivo que ojalá no se hubiera gestado. I Kiss Paris.

Qué busco con Kiss Paris? En Kiss Paris, quiero dar a conocer las entrañas de esta ciudad maravillosa, que deslumbra a cada paso, a cada mirada, en cada sentir.
Para aquel que ama esta ciudad, para el que no la conoce, para el que desearía visitarla, en Kiss Paris pretendo que encuentre todo lo necesario para disfrutar, sentir y vivir esta ciudad tanto como yo.

En un juego de palabras, como deseo que sea este lugar de encuentro: Kiss Paris… y al mismo tiempo “Keep It Simple and Spectacular in Paris”.

Te invito a que me acompañes y viajemos junt@s!

Silvana